Vía Univérsitas 19, bajos interior 50009 Zaragoza

info@envit.es

Compuestos orgánicos volátiles (COVs): Su impacto y manejo


Los Compuestos Orgánicos Volátiles (COVs) son elementos esenciales en nuestro entorno, pero su presencia y manejo representan un desafío importante para la salud pública y el medio ambiente. Los COVs son hidrocarburos que se encuentran en estado gaseoso a temperatura ambiente o presentan una alta volatilidad bajo estas condiciones. Estos compuestos pueden ser tan variados como el tolueno, tetrahidrofurano, etanol, acetato de etilo, estireno, acetona, ciclohexano, formaldehído y metiletilcetona, también conocida como butanona o mec​​.

Entrando más en detalle, se caracterizan por tener cadenas cortas de carbono y pueden contener otros elementos como oxígeno, flúor, cloro, bromo, azufre o nitrógeno. Se encuentran tanto en la naturaleza (COVs biogénicos) como en fuentes antropogénicas, siendo esta última principalmente debido a la evaporación de disolventes orgánicos, la quema de combustibles y actividades de transporte. Algunos de los COVs más comunes en el aire son el metano, tolueno, n-butano, i-pentano, etano, benceno, n-pentano, propano y etileno​​.

Los COVs pueden clasificarse según su peligrosidad en grupos que van desde compuestos extremadamente peligrosos para la salud, como el benceno, hasta aquellos de menor impacto ambiental, como la acetona y el etanol​​.

El principal problema medioambiental de los COVs es su contribución a la formación de smog fotoquímico en grandes ciudades con altos niveles de contaminación atmosférica. Estos compuestos reaccionan con otros contaminantes, como los óxidos de nitrógeno (NOx), en presencia de luz solar para formar ozono a nivel del suelo, que es un precursor clave del smog fotoquímico. Este smog es una mezcla compleja de compuestos químicos irritantes y nocivos para el sistema respiratorio. Es particularmente peligroso durante episodios de inversión térmica, donde los contaminantes se acumulan en las capas bajas de la atmósfera, aumentando el tiempo de exposición de los ciudadanos​​.

Las actividades humanas, especialmente aquellas que involucran el uso de disolventes orgánicos, tienen un impacto significativo en la emisión de COVs. Estas actividades incluyen la producción y uso de pinturas y barnices, procesos en la industria siderúrgica, la industria de la madera, cosmética y farmacéutica. Los disolventes orgánicos, debido a su diversidad química, presentan una variedad de usos y aplicaciones​​.

Para mitigar los efectos nocivos de los COVs, es crucial implementar estrategias de control y reducción de emisiones. Esto puede incluir la adopción de tecnologías más limpias, el uso de disolventes menos volátiles o con menor impacto ambiental, y la promoción de prácticas industriales y domésticas más sostenibles. Además, la concienciación pública sobre los riesgos asociados con los COVs y la importancia de reducir su uso y emisión es esencial.

La gestión efectiva de los COVs no solo beneficia la calidad del aire que respiramos, sino que también contribuye a la salud pública y a la preservación de nuestro entorno natural. Al tomar medidas conscientes y responsables, tanto a nivel individual como colectivo, podemos reducir significativamente la presencia de estos compuestos en nuestra atmósfera.

Recuerda, cada acción cuenta en nuestra lucha por un aire más limpio y un planeta más saludable. Comparte este artículo y contribuye a aumentar la conciencia sobre los Compuestos Orgánicos Volátiles y su impacto.

ENVIT
 

0 Comentarios

Deja un comentario


(+34) 976 364 286

Vía Univérsitas 19, bajos interior 50009 Zaragoza